La Mena Dos, La Lucha de los Pobres, La Forestal y Centro Histórico fueron las principales comunidades donde Aldeas Infantiles SOS desplegó a su equipo técnico en Quito durante 2017. El reto: fortalecer las competencias de las familias en la protección de derechos de los niños, niñas y adolescentes y prevenir la pérdida del cuidado familiar.
En
acompañamiento familiar el equipo trabajó con familias en situaciones de violencia intrafamiliar, adicciones, pobreza, enfermedades graves y discapacidad. Focalizaron 69 familias con este perfil en total de los cuatro sectores.
En este contacto con las familias el equipo, conformado por seis personas, logró acercarse a su realidad a través de visitas familiares, generar vínculos de confianza, aprender y sobre todo sentir la satisfacción al ver el fortalecimiento de las familias que ya cuentan con herramientas para el cuidado y protección de sus hijos e hijas.
Además, desarrollaron la metodología de
ruedas comunitarias, un espacio de escucha para recuperar y desarrollar las capacidades de las familias, rescatar la autoestima, valorizar sus habilidades y de los seres que les rodean. En total el equipo ejecutó 12 ruedas comunitarias.
Con los
talleres de Desarrollo de Habilidades Parentales el equipo consiguió que los padres y madres se reconozcan como los primeros encargados del cuidado y protección de los niños y niñas. Las familias vivieron un proceso de seis talleres en los cuales establecieron relaciones de confianza y seguridad.
En el marco de las mismas acciones, desarrollaron
talleres de capacitación para el emprendimiento. Verónica, participante de los mismos expresa: “esta es la oportunidad que tuve para pulir mis habilidades y transmitir mi conocimiento a otras mujeres en mi comunidad, para que tengan un medio para vivir como lo hago yo”.
El domingo 19 de noviembre de 2017, en el Centro de Formación de Aldeas Infantiles SOS Ecuador, el equipo del Programa finalizó este ciclo de intervenciones comunitarias con un evento de cierre al que acudieron todas las familias participantes, quienes mostraron alegría, ganas de continuar y motivación hacia ser gestoras de su propio desarrollo.