diciembre 19 2016

Lazos que unen fuerzas para la protección infantil



La Universidad Católica de Santiago de Guayaquil y Aldeas Infantiles SOS establecieron un convenio específico de cooperación interinstitucional destinado a promover y fomentar actividades académicas, científicas y culturales mediante la colaboración en los campos de la enseñanza teórica - práctica  y la investigación en mutuo beneficio, con especial énfasis en el desarrollo integral de niños, niñas y adolescentes.  Dentro de este acuerdo,  el día miércoles 23 de noviembre se reunieron 15 estudiantes de Trabajo Social de la UCSG para recibir capacitaciones sobre pasantías que realizarán en Aldeas Infantiles SOS, brindadas por parte del personal técnico de la Filial Guayaquil.

Para Antonia Lopez, directora del Programa Guayaquil, “es importante generar alianzas para promover el desarrollo de Comunidades Protectoras entendiendo a estas como  el conjunto de personas e instituciones que desarrolla acciones orientadas al cuidado y protección de los niños, niñas y adolescentes; trabajando constantemente en el desarrollo y fortalecimiento de sus capacidades y habilidades como actores sociales, es decir, como sujetos que pueden tomar decisiones y actuar conjuntamente, para definir compromisos y diseñar acciones concretas en torno a la protección infantil”.
 
La capacitación se dio en torno a la Crianza Positiva, lo cual implica un proceso en el que el cuidador crea un contexto protector y una relación afectiva con los niños, niñas,  adolescentes y jóvenes. Los pasantes participaron en una jornada vivencial en la que conforme se desarrollaba el taller, pudieron asomarse a la intimidad de cada uno. Esto, para luego comprender que el acercamiento y acompañamiento trata justamente de una relación afectiva y de respeto, que sostiene un vínculo y un desarrollo pleno, capacidades vitales para generar en las comunidades líderes y lideresas sensibles a los temas de infancia, derechos, participación entre otros.

Luisa Lázaro, 20 años, estudiante de Trabajo social y desarrollo humano, nos comenta:

“La capacitación me enriqueció con conocimientos sobre como interactuar con los niños/as y adolescentes, ya que aprendí formas de acercarme para poder establecer que fomenten la comunicación asertiva. En mi quehacer profesional me ha ayudado a tomar una postura ética y a ser responsable con la vida de las demás personas quienes podrían encontrar en mí un acompañamiento responsable sobre diversas situaciones, en las cuales podré intervenir para encaminar una mejor calidad de vida para cada uno de ellos/as.”
 
José Adrián Montiel Armijos, 24 años estudiante de Trabajo social y desarrollo humano, expresa,

“La jornada del día de hoy enriquece mi formación profesional y humana, ya que tuve la oportunidad de participar en dinámicas de generación de confianza, análisis de lo observado y además el reconocimiento e importancia que tiene para los sistemas de acogimiento los acuerdos y compromisos establecidos entre los usuarios y el equipo de trabajo.”