El Día del Niño se conmemora en medio de una pandemia mundial que mantiene confinados a niños y niñas

Este 01 de junio es importante recordar que niños y niñas están confinados, pero sus derechos no. Ellos y ellas están siendo la población más afectada por la pandemia, aunque no lo parezca.

Algunos de los derechos de niños y niñas que están siendo directamente afectados por la emergencia sanitaria son: el derecho a unas condiciones de vida dignas en cuanto a alimentación, vivienda, acceso a servicios esenciales como los de salud o los servicios sociales; el derecho a la educación (incluyendo el acceso a internet); el derecho al juego, al ocio, al esparcimiento y a la realización de actividades recreativas; el derecho a no ser objeto de ninguna forma de violencia, especialmente en el hogar; y el derecho a ser informado sobre la situación actual con recursos acorde a su edad. Quienes más se ven afectados son niños y niñas: con discapacidad, migrantes y solicitantes de asilo, quienes viven en instituciones de acogida, pertenecientes a minorías étnicas, con enfermedades subyacentes, y en situación de pobreza.  

Al momento, 188 países han impuesto el cierre de escuelas en todo el mundo, afectando a más de 1.500 millones de niñas, niños y adolescentes. Se sabe que los niños (y especialmente las niñas) en edad escolar que no van a la escuela durante largos periodos de tiempo tienen muchas menos probabilidades de regresar cuando se reanudan las clases, según estimaciones de Naciones Unidas.

El cierre de las escuelas también elimina el acceso a programas de nutrición escolares y, con ello, dispara las tasas de malnutrición. 

Cientos de miles de niños y niñas podrían morir este año, en comparación con un escenario previo a la pandemia, como resultado de la recesión mundial que se avecina. Esto revertiría en un solo año los progreso de los últimos 2 a 3 años en lo que ha reducción de la mortalidad infantil se refiere, según estimaciones de Naciones Unidas.

Como Aldeas Infantiles SOS Ecuador consideramos fundamental para los niños y las niñas del país que:

• La tele-educación no exacerbe las desigualdades existentes ni reemplace la interacción estudiante-maestro, y que se garantice el acceso a internet de todos los niños y niñas, sin excepción.
• La alimentación nutritiva no debe ser un privilegio, niños y niñas deben acceder a la misma durante el período de la emergencia, ya que muchos de ellos y ellas recibían su única comida balanceada al día a través de esquemas de alimentación escolar.
• La provisión de servicios básicos, incluyendo atención médica, agua, servicios sociales y de salud mental deben estar garantizados para niños y niñas.
• La protección contra la violencia, la explotación y el abuso es esencial, el personal de educación y salud deben ser un apoyo para alertar con inmediatez los casos. De igual forma, se debe contar con líneas de atención eficaces, acceso a la justicia y casas de acogida para las víctimas.