San Pablo es familias empoderadas

La Parroquia de San Pablo, en Portoviejo, es un territorio que cuenta con el acompañamiento del equipo de Aldeas Infantiles SOS Ecuador. El trabajo con familias focalizadas ha dado un giro en la convivencia diaria de la comunidad, a través de la metodología de acompañamiento familiar.
 
El  acompañamiento familiar logra que los niños, niñas y adolescentes se desarrollen integralmente en un entorno familiar y comunitario protector y afectivo, en donde promueven sus derechos y previenen situaciones de vulneración.
 
Nancy es madre de cuatro niños y cuida a sus cuatro sobrinos. A través del acompañamiento familiar, Nancy aprendió a llevarse mejor con sus hijos y sobrinos, a guiarlos en sus tareas y enseñarles responsabilidades con amor. “Dentro de todo este proceso he conocido y puesto en práctica todo lo aprendido como lo es el cuidado para mis hijos, mi familia. Aprendí a relacionarme  y participar dentro de mi comunidad”, expresa Nancy.
 
Ella, al igual que muchas mujeres de San Pablo, forma parte de las Defensorías Comunitarias, una forma de empoderar a las mujeres para que sean ellas quienes enseñen a sus vecinos sobre el cuidado a la familia y la convivencia comunitaria.  
 
Por otra parte, Gabriela Pillasagua, facilitadora comunitaria en San Pablo, menciona que “el trabajo con 24 familias de la Parroquia  consiste en trabajar las condiciones básicas para el ejercicio familiar, es decir que las familias generen condiciones de equidad y propicien su autonomía”.
 
Hasta el momento en San Pablo, las familias acompañadas se fortalecen en cada paso y las mujeres que lideran las Defensorías Comunitarias se involucran cada vez más en la vida de su parroquia. Ellas tienen incluso espacios de participación provincial.